18 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Alex Flórez Hernández y Eduardo Merlano

Martin Cardona Mendoza

Por Martín Cardona Mendoza 

Estos dos personajes caribeños hoy por hoy tienen bastante en común. 

Eduardo Carlos Merlano Morales, exsenador de la República por el partido de la U, por hechos suscitados el 13 de mayo de 2012 en un retén en Barranquilla cuando conducía una camioneta oficial, pretendió utilizar su dignidad para evitar que se le practicara una prueba de alcoholemia, incluso se contactó con un alto oficial para evitar que sus más de 50 mil votos, como quedó registrado en el procedimiento, eran superiores al deber ciudadano de acatar una orden de una autoridad que cumplía un deber constitucional. 

Por esos hechos, aparentemente inanes, el señor Merlano Morales fue destituido por la Procuraduría General de la Nación y, además, en decisión del 6 de noviembre de 2014, la Sala Plena del Consejo de Estado decretó la pérdida de investidura de senador. 

Alex Xavier Flórez Hernández, ungido como senador de la República, apenas el 13 de marzo de 2022, y que solo este 20 de septiembre cumplirá dos meses en ese destino público, en su corta, pero ya cuestionada vida pública, pese a su corta edad, ya viene dando bastante de qué hablar, pues, no son buenos los antecedentes como servidor público en su paso por el Concejo de Medellín frente a su comportamiento habitual por fuera de ese cabildo.  

A lo anterior se suma su recorrido por los estrados judiciales. En providencia del 3 de septiembre de 2020, la Sala Plena del Tribunal Administrativo de Antioquia, con ponencia del Magistrado Daniel Montero Betancur, decretó la pérdida de investidura de concejal de Medellín, por violación al régimen de inhabilidades con ocasión de un contrato estatal que suscribió en periodo prohibido; decisión que fuera confirmada el 9 de diciembre de 2021 por la Sección Primera del Consejo de Estado.  

Pese a la muerte política que había sido decretada, en ejercicio de su función como concejal, encontró cobijo en la lista del Pacto Histórico y como una ficha directa del alcalde de Medellín Daniel Quintero Calle, sin mayores dificultades resultó elegido senador el 13 de marzo último en una lista cerrada presentada por esa coalición. 

Lo demás ya lo conocen millones de colombianos, que han sido testigos durante las últimas horas del vulgar comportamiento propiciado por el senador de origen cartagenero, que valido ilegalmente de su condición de padre de la patria, quiso hacer pesar su investidura como senador de la República, al parecer para ingresar irregularmente al Hotel Caribe de Cartagena en las primeras horas del pasado 2 de septiembre, a una acompañante, sin el debido registro de huéspedes.  

Lo relevante no lo constituye realmente la prohibición apenas natural que le exigió la administración del hotel que finalmente no le permitió el ingreso de una persona que no estaba debidamente identificada, como lo han difundido varios medios de comunicación nacional; lo clave y delicado es el trato desmedido y violento verbalmente, propio de la procacidad que ya no tiene límites en la persona de Flórez Hernández, quien no dejó como concejal de Medellín un comportamiento digno de quien ostenta un destino público a nombre de la ciudadanía, que con sus impuestos contribuye a las prerrogativas de quien ocupa un cargo de representación popular. 

El censurable comportamiento de Flórez Hernández superó todo límite tolerable y por hechos menos graves el exsenador Merlano Morales, como ya se indicó, fue destituido y perdió su investidura de senador en el año 2014. 

No es suficiente que una actitud permisiva de la Policía Nacional adscrita a la ciudad de Cartagena al retirar la denuncia penal, que es más un acto de genuflexión institucional que de generosidad propia del Gobierno del Cambio que todo lo quiere negociar y transigir, sea lo suficiente para creer que la eventual causal para fundar un proceso de pérdida de investidura quedó completamente extinta. Al contrario, queda abierta la vía para que, en un proceso de doble instancia, la primera surtida en una Sala especial del Consejo de Estado y la segunda ante la Sala Plena del Consejo de Estado, en un término de cinco años, cualquier ciudadano impulse un proceso de indignidad política contra quien ya se sabe, tampoco es tolerado en su propia bancada, sobre todo, por las respetables damas que en el Senado y la Cámara de Representantes hacen parte de esa coalición de Gobierno. 

Ojalá y de acuerdo con el deber previsto en el artículo 2 de la Ley 1881 de 2018 que gobierna en Colombia el procedimiento de pérdida de la investidura de los congresistas, el presidente del Congreso de la República, Roy Barreras Montealegre, active sus poderes oficiosos, tenga el valor de disciplinar su propia coalición y solicite al Consejo de Estado el inicio de un juicio de pérdida de investidura contra el senador Alex Flórez Hernández. 

Se tiene conocimiento que la Procuraduría General de la Nación abrió indagación previa con el fin de verificar estos hechos, en los cuales se observa al senador Flórez Hernández intentando agredir físicamente a dos uniformados y vociferando palabras soeces contra estos servidores públicos. Además, usó la camioneta de dotación hasta la madrugada del día 2 de septiembre poniendo en riesgo su seguridad y la de una acompañante que apenas conocía. 

La sociedad colombiana no está conforme con los actos de contrición del joven senador, el país reclama con prescindencia de debates ideológicos y políticos es respeto por la institucionalidad; Flórez Hernández ya ha dado altísimas muestras de que sobrio, en estado de beodez o incluso en sus arengas públicas que no es amigo de la Fuerza Pública, que su animadversión hacia la Policía y al Ejército Nacional es ancestral para recurrir a un adjetivo tan recurrido en el Gobierno del Cambio. 

Por eso como ciudadano me indigna la mansedumbre con que la Policía Nacional adscrita al Distrito de Cartagena haya retirado la denuncia penal contra el senador, nada raro que esa instrucción haya venido directamente del Ministerio de Defensa Nacional para favorecer en eventuales procesos al señor Flórez Hernández.