28 marzo, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Al oído y en voz baja… ¿Y el Gobierno cuándo y cómo se va a apretar el cinturón?

@IvanDuque @Minhacienda

  • Esta es la pregunta que se hacen los colombianos en medio de la crisis fiscal, social y económica por el impacto de la pandemia y ante la inminencia de la llegada al Congreso del proyecto de reforma tributaria.

  • La pregunta se la hacen angustiados urgiendo al Gobierno para que también se apriete el cinturón, no solo ejecutando el presupuesto de forma más eficiente sino recortando gastos de funcionamiento y rubros no prioritarios.

  • El año pasado el Gobierno dejó de ejecutar recursos de su gasto público cercanos al 4% del PIB, es decir $41 billones de un total permitido de $255 billones. Esta situación, que afecta considerablemente las finanzas del Estado, es un problema recurrente. No en vano en los últimos años el Ejecutivo ha dejado de invertir entre 2% y 4% de los recursos que estaban asignados.

  • La solicitud no es para menos si se tiene en cuenta que la Nación necesita recursos y con la reforma tributaria busca conseguir al menos $15 billones, pero ha dicho que son $25 billones.

  • En contraste, este año el Gobierno les autorizó un incremento del salario de los congresistas de 5,12%.

  • Es decir, se aumentó el salario de cada uno en $1,67 millones, lo que significa que a partir del primero de enero de 2021 pasaron a ganar $32.740.000, más los gastos de representación, $14 millones para cada uno y ni los citó a extras.

  • ¡En coche!, y los colombianos pasando gárgaras…

  • Todo un despropósito cuando el salario mínimo de los colombianos subió 3,3% para este año, es decir $30.723 al día, pasando de $877.803 a $908.526 al mes.

  • Este es el caso del Congreso de la República, que en medio de la emergencia sanitaria no avanzó en la rebaja ni congelación de sus altos sueldos, pese a los llamados de todos los sectores.

  • Según conoció este diario, en el Ministerio de Hacienda se está estudiando la posibilidad de continuar con el plan de austeridad que se hizo en 2020, con la supresión o fusión de entidad e incluso de congelar los altos salarios de funcionarios, como una respuesta al ajuste interno dentro del Gobierno.