19 abril, 2024

Primicias de la política, empresariales y de la farandula

Al oído y en voz baja… Gobierno y Congreso ni siquiera tienen agenda…

@IvanDuque

  • Tremendo el reto que afronta el Congreso a partir de mañana.

  • Luego de un 2020 en el que la productividad legislativa fue evidentemente muy pobre no solo por la emergencia sanitaria, social y económica derivada de la pandemia, sino porque ello trastocó gran parte de la agenda de proyectos de ley y acto legislativos en trámite.

  • El arranque del segundo tramo de la tercera legislatura no es muy prometedor.

  • Salvo algunas reuniones del ministro del Interior Daniel Palacios Martínez (foto), con varias bancadas, sobre todo de la coalición oficialista, no se produjo una cumbre en Palacio para priorizar la agenda legislativa, tanto la de origen gubernamental como la parlamentaria.

  • Los congresistas se ganaron el sueldo redondo sin trabajar y sin mover un pelo durante 2 meses y medio…

  • Las sesiones se retoman en medio de un caldeado ambiente partidista. Se anuncia un alud de citaciones a debates de control político por múltiples crisis y controversias de los últimos dos meses y medio.

  • Obviamente estas citaciones seguramente le quitarán tiempo y espacio a una serie de iniciativas de ley y reforma constitucional que se consideran urgentes.

  • Nadie se explica que tras un 2020 en el que muchos proyectos quedaron varados por el impacto de la emergencia en el ritmo de trabajo del Congreso, no se haya citado a sesiones extraordinarias en el arranque del 2021.

  • Pesaron más los temas de campaña electoral, el creciente clima de polarización y la misma politización de asuntos de primer orden, como el esquema de la vacunación contra el covid-19, que la necesidad de acelerar la agenda legislativa.

  • Es imperativo un acuerdo multipartidista para priorizar la agenda. Hay un alud de iniciativas en curso desde el año pasado, al tiempo que senadores y representantes han anunciado otro tanto para radicar en las respectivas secretarías.

  • Son apenas tres meses de trabajo efectivo y es innegable que el segundo semestre estará cruzado por una campaña a todo vapor de cara a las parlamentarias de marzo de 2022 y las movidas previas para la selección de precandidatos presidenciales, aspirantes definitivos y la estructuración de las coaliciones que competirán por la Casa de Nariño, las mismas que irán a las urnas en la jornada en que se renueva Congreso. (Con datos de El Nuevo Siglo).