En los exclusivos corrillos bogotanos, que dicen codearse con fuentes exclusivas de Palacio, dicen que el presidente Duque (foto) la tiene muy clara frente al tema del ELN.
Si no hay liberación de secuestrados y perdón a las víctimas de sus actos terroristas, como por ejemplo a los familiares de los 22 cadetes asesinados vilmente hace dos años, nada de nada de conversaciones…
Pueden brincar todos los admiradores del ELN y los congresistas que se la están dando ahora de nuevos socialistas, para tomar tinto con Iván Cepeda y Gustavo Petro.
Duque, como la mayoría de los colombianos, considera que la arrogancia de los terroristas del ELN protegidos en La Habana por el Gobierno cubano, donde se están dando la buena vida de burgueses occidentales, es una ofensa a todas las víctimas de sus actividades terroristas.
Hoy, en el triste homenaje a las 22 personas muertas en el atentado terrorista del ELN a la Escuela de Cadetes, el presidente de la Republica, Iván Duque, nuevamente lamentó este hecho e indicó que comparte la tristeza de las familias que perdieron a sus seres queridos y recordó que existen órdenes de capturas contra los autores intelectuales de estos hechos.
«Existen órdenes de captura contra los autores intelectuales de este crimen y circulares rojas de Interpol y no claudicaremos y no desfalleceremos en pedir su extradición cuántas veces sean necesarias», dijo Duque.
«Quienes apagaron las voces de estos jóvenes son terroristas y como tal, solamente les debe recaer el peso total y absoluto de la ley», expresó el jefe de estado.
El presidente de la Republica insistió que la construcción de la paz se debe hacer sin impunidad porque de lo contrario termina incubando nuevas formas de violencia.
Así mismo en la homilía, el obispo castrense monseñor Fabio Suescún resaltó el valor de los jóvenes e indicó que el dolor de estos hechos que ocurrieron a las 9:30 de la mañana, el 17 de enero del 2019, no se ha borrado.
«Censuramos, una vez más, está actitud criminal y pedimos al señor en esta eucaristía para que esos corazones entorpecidos sean capaces de una auténtica conversión para colaborar con una patria mejor», expresó el obispo castrense.
En la capilla se extendió un mural con las fotos de los cadetes y una ofrenda floral con 22 velas.
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