
Por Javier Hoyos Arboleda
- En febrero de 2025, la fuerza de trabajo en Colombia se situó en 26.173.000 personas, de las cuales 2.704.000 desempleadas y 23.469.000 estaban ocupadas. De la población ocupada, 13.668.000 eran hombres (58%) y 9.802.000 eran mujeres (42%).
- Por posición ocupacional, el 42,9% correspondía a obrero, empleado particular, el 42,7% a trabajadores por cuenta propia, el 4% a obrero, empleado del gobierno y el 3% a empleado doméstico. Los sectores con mayor participación en el empleo fueron comercio y reparación de vehículos, 17,5%; el sector agropecuario, 14,3%; la administración pública, defensa y atención a la salud humana, 12,1%; y la industria, 11% (Ver cuadro 1 y 2).
· Durante febrero, la población ocupada creció en 977.000, lo que representa un incremento del 4,34%. De este total, 426.000 fueron hombres con un crecimiento del 3,2% más, y 550.000 fueron mujeres, esto es, un 5,9% más. Del total de los nuevos puestos creados el 69% correspondió a empleo por cuenta propia, que creció 7,2%; durante el mes se registró un aumento en la informalidad y una reducción en la tasa de desempleo juvenil.
- Por sectores, los de mayor crecimiento en el empleo fueron: la construcción, con un aumento del 14,8% a pesar de que sus principales indicadores muestran datos negativos (producción de cemento, producción de concreto y licencias de construcción), seguido por alojamiento y servicios de comida, 11,3%; y la administración pública y defensa, educación y atención a la salud humana, 8,3%.
· Dado que en febrero la ocupación nacional creció un 4,34% mayor al incremento de la oferta laboral del 2,79%, la tasa de desempleo disminuyó del 11,7% en febrero del 2024 al 10,3% en febrero del 2025.
- La población desempleada se redujo en 267.000 personas, esto es un 8,98% menos. En las trece principales ciudades del país, la tasa de desempleo pasó del 11,6% en febrero de 2024 al 9,8% en febrero del 2025.
- En un interesante artículo publicado en El Tiempo el 28 de marzo, el exministro de hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría, señala cómo la contratación en este gobierno se ha convertido en una estrategia electoral que busca hacer la diferencia en las elecciones futuras.
- En su análisis denominado el «empleo militante», indicó que es una práctica utilizada para contratar personas afines al gobierno, quienes reciben salarios del Estado sin contribuir significativamente al desarrollo del país, sacrificando en cambio billones de pesos que podrían destinarse a infraestructura y vivienda.
- Según Cárdenas, en 2024 se firmaron 703.000 contratos y, en lo que va de 2025, el gasto en prestación de servicios ya supera los $14,3 billones, con un récord de 140.000 contratos solo en febrero. Además, destacó que la contratación directa desde que inició el gobierno llega a 1,8 millones de contratos, con un gasto total de $59,4 billones. (Economía). (Vea el boletín).
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