
@FicoGutierrez
La ciudad ya ha vivido horas terribles por cuenta de los fanáticos desaforados o bandidos que se disfrazan de hinchas.
Las autoridades han logrado imponer el orden y la tranquilidad, y valga decir que las hinchadas del Atlético Nacional e Independiente Medellín se han puesto de acuerdo en las diferencias, para que los partidos en el Atanasio Girardot se jueguen en paz y en el debido respeto.
Pero lo que ha venido haciendo el técnico mexicano del Nacional, Efraín Juárez, merece un castigo ejemplar, porque un día cualquiera este señor irresponsable nos puede conducir a una tragedia. En camino viene una sanción de una inspectora, que no se ha hecho realidad porque está en apelación, con base en el debido proceso.
Pero la gran preocupación, es que el mismo día en que es notificado de la sanción, vuelve a caer en la misma irresponsabilidad celebrando un gol frente al banco del Independiente Santa Fe. Otra provocación tan osada como la que protagonizó contra los hinchas del Independiente Medellín.
Igual de irresponsable es el presidente del Nacional, Sebastián Arango, quien no solo sale infantilmente a justificar a este patán, diciendo que esa es su forma de celebrar un gol, sino que les echa la culpa a los periodistas por narrar lo que hace el técnico. En el Nacional la estrategia es convertirlo en víctima de los rivales y de los periodistas.
Señor alcalde Fico Gutiérrez, usted ha hecho muchos esfuerzos para que la paz y la armonía regresen al Atanasio Girardot. Y a usted no le queda muy bien salir a defenderlo en alguna forma. Las actitudes groseras de este señor no tienen justificación de ninguna manera. Que se defienda él por sus propios actos.
El, como jefe técnico de un equipo de fútbol, no solo debe comportarse como un caballero, sino dar ejemplo de decencia a sus dirigidos. Aunque todo parece indicar que lo primero que debe hacer este señor Efraín Juárez, es recibir unas clases de decencia, en compañía del presidente de su equipo Sebastián Arango.
Todos sabemos que un equipo, unos jugadores, unos directivos y un cuerpo técnico, no solo deben saber de fútbol. Primero deben ser personas decentes y respetuosas, señores Efraín Juárez y Sebastián Arango. Pero pilas señor alcalde
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