Al oído y en voz baja… -

Lo dijo ayer un estudiante en el Metro: – “Ciudadano, cuídese que la Corte Suprema está chuzando teléfonos por equivocación… y de pronto lo enredan”.
Cada día el país recibe una nueva sorpresa con el engorroso asunto de la coca.
En el Congreso, especialmente, se preguntan por qué la ONU (Logo) se sorprende con la cantidad de hectáreas sembradas en el país, si este organismo estuvo de acuerdo en todos los puntos de los acuerdos de La Habana
Sabía además que el narcotráfico de droga sería un delito conexo.
Y la ONU también avaló que se les pagaría a los campesinos por las cosechas de coca, lo que los incentivó a cultivar más.
Y conocían también que los disidentes se quedarían cuidando el negocio, mientras los amnistiados continuaban conversando.
Pero recuerden que para el Gobierno y la ONU era el mejor acuerdo posible, como se lo recordaba cada rato al país Humberto De la Calle.
Pero lo que tal vez no se vislumbró en ese momento, era el futuro que le esperaba al país y al próximo gobierno.
Y ahora viene la ONU a desgarrarse las vestiduras, si este organismo fue cómplice de la catástrofe de la cual quiere responsabilizar a los colombianos.